jueves, 28 de octubre de 2021
jueves, 7 de octubre de 2021
Komboskini, el rosario ortodoxo.
El Komboskini es un tipo de rosario ortodoxo que más tarde, fue copiado por algunas ramas del Islam (bajo el nombre de Tasbih). Su longitud suele ser de 30 o 50 nudos, y los sacerdotes ortodoxos, desde tiempos del Imperio Bizantino acostumbraban a llevarlos siempre en la mano.
La costumbre de llevar siempre un Komboskini en la mano, fue practicada también en Europa Occidental durante siglos, hasta que cayó en desuso. Para ello se confeccionaban rosarios de menor longitud a la normal, de unas 30 bolas o nudos.
La tradición atribuye a San Pacomio la invención del cordón de oración (una cinta, generalmente hecha de lana virgen, símbolo de la pureza del Cordero de Dios, o de hilos de seda, trenzada de nudos a todo lo largo) en el siglo IV, en pleno nacimiento del monasticismo.
Cuando los monjes y anacoretas comenzaron a adentrarse en los desiertos de Egipto a vivir una vida dedicada a la oración, solían rezar los ciento cincuenta salmos diariamente. Sin embargo, como muchos de estos monjes eran analfabetas, tenían dos opciones: o se aprendían el salterio entero de memoria, o sustituían el rezo de los salmos por otras oraciones. Entre ellas, la jaculatoria más famosa, “Señor Jesucristo, Hijo del Dios vivo, ten piedad de mi, que soy pecador”.
La intención de San Pacomio, cuenta la tradición, era que los monjes pudiesen seguir el consejo de San Pablo en la primera epístola a los Tesalonicenses, “oren constantemente”.
San Tijón de Moscú, Patriarca de Rusia en tiempos del Terror Rojo, salvó a la Iglesia Ortodoxa Rusa de su total exterminio y supresión. En la foto, se le ve llevando un cordón de oración en la mano izquierda.