domingo, 11 de mayo de 2014

La Atlántida y el origen de la humanidad (I)


Reseña tomo XII: Hundida a 5000 ms., frente a Llanes y los Picos de Europa: la Atlántida, al fin descubierta

Alrededor de 12.000 años después, el hundimiento del Titanic vino a recordarnos la que en realidad ha sido la mayor catástrofe natural sufrida por la Humanidad a lo largo de toda su Historia: el momento en que, al hilo de las convulsiones en la corteza terrestre que acompañaron al desenlace de la última glaciación, con el incremento en hasta 120 metros del nivel de los Occéanos, la estrechísima, abrupta y, por ende, muy frágil plataforma continental cantábrica fue a quebrarse en algunos de sus bordes, desprendiéndose de ella los fragmentos sobre los que se erguían las Islas Atlántidas que, por consiguiente, más que hundirse propiamente, lo que hicieron fue resbalar de la Plataforma Cantábrica y precipitarse, imponentemente, hasta los cinco mil metros de profundidad que se abren al pie de ella y que son los mismos que fueran idealizados por nuestros antepasados como los Abismos del Tártaro... Sí, aquellos en los que tenían su morada, léase su tumba, nuestros primeros antepasados los Tirtanes o Titanes, epónimos del barco que protagonizó la mayor tragedia de la historia de la navegación...

Valorada hasta hoy como una simple montaña submarina cuya cima se encuentra a 500 ms. de profundidad, los oceanógrafos que están investigando esta magna Isla cantábrica, sostienen que su nombre, KATXUTXO = Cachucho, tiene su origen en una determinada familia de peces muy abundante en esa zona. Cuando en realidad sucede a la inversa y son los peces los que deben su nombre a esa enorme ISLA, sumergida junto con otras de menor envergadura desde hace alrededor de 12.000 años, cuando los movimientos sísmicos que acompañaron al desenlace de la última glaciación, produjeron una fractura en la estrecha y frágil Plataforma Continental cantábrica. Lo que hizo que se desprendieran de ella, resbalando hasta los fondos abisales, todas aquellas Islas que se apiñaban frente a los Picos de Europa y de las que, la mayor de ellas, es aquella que, desde hace decenas de miles de años, responde al nombre de KATXUTXO. 





La trascendencia histórica de aquellas Islas Atlantes, sumergidas desde una época tan remota, ha sido tánta como para que el más antiguo mapa de España conocido, el Atlas de Ptolomeo, con cerca de dos milenios de antigüedad, las reproduzca junto a la Costa Asturiana, en una posición muy similar a la que realmente ocuparon. Como quiera que todos los mapas que se elaboraron hasta el Descubrimiento de América se inspiraban muy directamente en aquella Tábula de Hispania ptolemaica, el hecho es que hasta hace escasamente cinco siglos, la inmensa mayoría de los mapas de España han seguido representando esas Islas en la Costa Cantábrica y, además, por partida doble, denominándolas a unas Kassiterides y a las otras, Skopuli Tri-Leuki.

En cuanto a la Isla Mayor de la Atlántida, una de sus características era su extraordinaria altitud, que se aviene bien con los 4.500 ms de altura del KATXUTXO y con el mito de que el gigante Atlas sostenía el Cielo sobre sus hombros... Y otro rasgo en común entre aquélla y éste, es el de que se coronaba con una impresionante meseta que estaba exclusivamente consagrada al culto religioso y que, obviamente, había sido allanada, amesetada, por la mano del hombre. No existe ninguna cumbre en el planeta, de semejante altitud, que se remate con una meseta, soliendo ser las montañas tanto más agudas cuanto más elevadas...

Al fin conocemos el emplazamiento exacto de la mayor de las islas de aquel Archipiélago hoy sumergido y la que dio nombre a aquel País y al propio Occéano que lo bañaba... Extraordinaria ISLA montañosa cuyos casi 5 kilómetros de altitud máxima la convierten en el macizo más alto de la Península Hibérica y en uno de los más elevados de Europa, a poca distancia del Mont-Blanc alpino que, por cierto, le debe su nombre. He aquí lo que el llamado Padre de la Historia, Heródoto, nos dice al respecto:

A otras diez jornadas de camino se encuentra otra colina de sal, con agua y habitantes en los aledaños. El monte Atlas toca a esta colina. Es estrecho y cilíndrico por todas partes, pero tan alto que, según se dice, resulta imposible ver su cima a causa de las nubes que la cubren tanto en invierno como en verano. Los habitantes del país dicen que es una de las columnas del cielo. De esta montaña han tomado el nombre de Atlantes y se dice de ellos que no comen nada que haya tenido vida y que jamás tienen ensueños.

Las Islas principales de la Atlántida, en razón a su enorme altitud que aventajaba con creces a la de sus vecinos los Picos de Europa, fueron idealizadas por la Humanidad primitiva como las COLUMNAS DEL CIELO, naciendo de ello el mito que pretende que el gigante ATLAS o ATLANTE sostenía el Universo sobre sus hombros... Fueron esas mismas Columnas las que la Cultura clásica pretendía que habían sido erigidas por Hérkules, Bako, Íkaro, Brigareo y otros Dioses afines. Por eso dice Platón en sus Diálogos que... la isla de Atlantis se erguía junto a las Columnas de Herakles. 



BESPÉRIDA fue un antiguo nombre de la Isla de AZTALLANTA o Atlántida que, como ha sucedido con los de Hiberia e Hispania, se proyectó más tarde al conjunto de la región en la que nace el río HEBRO, para acabar designando, por extensión, a la totalidad de la Península Hibérica. He aquí lo que a este respecto escribiera Miguel Morayta en su otrora popularísima Historia de España: El nombre de Hesperia que se daba a España, alude claramente al planeta Venus, llamado vulgarmente Lucero, que en griego se llama Hespero y en latín Vesper o Vesperus; y porque el dicho planeta, siempre que al anochecer se ve está hacia Occidente, por esto los nombres Hesper o Vesper significan cosa occidental; y también significa la tarde o última parte del día cuando el Sol está en Occidente, por lo que tiempo vespertino es la tarde. Los Árabes llaman al África en general Magreb, que significa Occidental y extienden también este nombre a España, a la que comúnmente llaman Andalus y al español Andalusí. En la lengua arábiga la palabra magreb es la más propia y usada para significar cosa occidental. Los nombres, pues, de Hesperia, Magreb y Andalos dados a España, aluden a su situación que es la del país europeo más occidental. En la historia mitológica de las naciones irlandesa y escocesa, se finge que el nombre de Iberia debió empezar por los países de España que están al Océano, en la que según dicha historia dominó el rey Hibero.

Millares de datos y de pruebas acreditan la reducción Astur-bizkaína de la extraviada y crucial Hespérida. Pues bien, sin perder de vista que los Atlantes respondieron indistintamente a este gentilicio y a los de Titanes, Hesperios, Etherios y Ethíopes, valórese esta impresionante información transmitida por Proclo...:

Marcello, que escribió una historia sobre los asuntos Ethíopes, dice que existió una GRAN ISLA, documentada por todos los que escribieron historias relacionadas con el Mar Externo [el Occéano Atlántico]. Pues ellos cuentan que en ese tiempo había SIETE ISLAS en el Mar ATLÁNTICO, consagradas a PROSERPINA; y, además de éstas, TRES de inmensa magnitud consagradas a Plutón, Iobe y Neptuno. Y además, los habitantes de la última isla conservaban la memoria de las prodigiosas dimensiones de la isla Atlántida, según lo habían referido sus antepasados, y que ella gobernó durante mucho tiempo todas las islas del Mar Atlántico. Desde esta isla puede pasarse a otras grandes islas más allá, las cuales no están lejos de la tierra firme, cerca de la cual está el verdadero mar.

El Dr. Alfonso R. de Guevara dejó documentado hace cuatro siglos que... el Oráculo principal de los HISPANOS, consagrado a la Diosa PROSERPINA, estuvo situado en las antiguas ASTURIAS de Santillana..., integradas hoy en la Provincia de Santander y conocidas antaño, indistintamente, como Asturias y como Bizkaya... 

Jorge María Ribero Meneses



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